LOS CARACOLES

Por qué después de llover vemos muchos caracoles

Cuando llueve aunque sea poco vemos entre los matorrales y hierba grandes cantidades de caracoles, entre al húmeda vegetación con su lentitud y arrastrando su peculiar concha con su maravilloso espiral, que le sirve para ocultarse ante el menor peligro.

 Los caracoles requieren de mucha humedad para su vida activa, es por ello que salen en tiempo de humedad cuando llueve, permanecen bajo tierra en los períodos de sequía; durante el invierno entran en letargo, después de cubrir la concha con un material pegajoso que los cubre de las inclemencias del tiempo, permitiendo la entrada de aire  para la respiración.

Existen muchas variedades de caracoles, tanto terrestres como acuáticos, algunas de ellas son comestibles siendo una fuente de alimentación para algunos seres humanos, estas varían de un lugar a otro, por ejemplo en Europa hay algunos que miden cinco centímetros de diámetro, varían en África en donde se encuentran ejemplares gigantes alcanzando hasta los 20 centímetros de longitud.

Los caracoles son parientes cercanos de las babosas, son auténticas plagas de los huertos, siendo muy voraces, estos organismos también requieren de mucha humedad y por  lo general las vemos en primavera  en la madrugada, o en ocasiones por la noche en los lugares que tienen más humedad de nuestras casas